domingo, 27 de enero de 2019

Hay que ser gigante


Todos los símbolos tienden cadenas a la conciencia.
Todos los símbolos esclavizan.
Todos los símbolos nublan la razón.
Todos los símbolos nos alejan de la verdad.

Nuestras alas están plegadas y ya olvidamos que las tenemos.
Nuestros pies gastan caminos ajenos y ya olvidamos correr.
Nuestras manos palmean espejismos y ya olvidamos cerrar el puño.
Nuestras bocas replican quimeras que entierran la luz primaria de nuestra conciencia.

Hay que ser libre de todo viento y corriente, hay que ser gigante.

domingo, 20 de enero de 2019

Paseo


Sobre la estrella de los vientos me detengo. El sol calienta mi espalda y la brisa de finales de enero me apacigua.
Veo gente paseando no muy lejos, entre la maleza que rodea mi posición, junto al observatorio legendario, impasible al devenir del tiempo y a la expansión del espacio.
Sobre la estrella de los vientos espero su llegada consciente de que es muy posible que hoy no sea el día, ni éste el lugar indicado. Me he perdido en un mar de miradas y ya no distingo la luz de los ojos limpios de aquellos que no dicen nada. Un conejo pasa precavido a mi lado, se refugia entre los matorrales y se pierde, como mis esperanzas de hoy.
A veces siento que todo marcha bien y a veces, solo quiero dormir eternamente. Me alcanzan señales que no consigo retener, luces que se muestran a lo lejos en breve destello, fugaces muestras de lo posible, de los quizás y de los ojalá. Suspiran las almas por hallar donde reposar sus miedos, por obtener trincheras que los protejan de la metralla que sin remedio nos lanza la realidad, en otras almas igualmente heridas. Y en ese camino de búsqueda me encuentro, como infante el día de pascua, sin huevo a la vista.

Pensamiento


Que fluyan la palabra, la poesía, el amor y otras drogas, hoy más que nunca hay síndrome de abstinencia.

lunes, 14 de enero de 2019

Velas nuevas

Anclé mi barca tiempo atrás
para morir en vida.
Renegando de ti enjaulé mi alma,
y esquivando tu mirada sequé mis ojos.
Pero tu fuerza es mayor
y ahora me arrastras de nuevo a tus mares infinitos.
No puedo si no volar en tu corriente,
preso libre de tu tiro.
Ya no hay maromas represoras,
ya no hay ancla que me fondee.
sólo velas nuevas, hinchadas de futuro.