lunes, 20 de septiembre de 2010

Poema pendiente

Me asomo embriagado en esta ventana
porque algo me llama en tu nombre.
Busco aquello que siempre busco;
un recuerdo grato, una imagen hermosa.
Siempre busco fuera aquello que guardo dentro.
¿Recuerdas esa noche de rayos en tu viejo piso?
Tu ya no vives allí , pero siempre será tu casa.
Para mí y los de mi quinta, siempre será tu casa.
Ese lugar de días especiales,
ese espacio de magia y misterio,
ese cofre de palabras prohibidas,
ese cajón secreto donde guardar golosinas,
ese recinto acuartelado de normas divertidas,
ese hogar huérfano de padre, huérfano de hija.
Me asomo embriagado en esta ventana
y los ojos húmedos me delatan.
Me delatan ante esta hoja inquisidora
que destapa como nadie mis secretos.
Me interrogan y tratan de quitarte valor.
Porque eres mujer, como otras, cualquiera.
Porque eres alma imperfecta,
cuerpo pecador, verbo equivocado,
sábana de secretos, estela de lo ingrato, madre injusta!
abuela, mi abuela.
Atrás quedan rencores,
rencores que no son míos.
Atrás quedan ruidos
en días soleados y hermosos.
Atrás queda todo,
todo aquello que no me diste;
dolor, odio, envidia, miedo, cobardía...
Atrás queda todo esto,
delante solo quedas tú.
Me asomo embriagado en esta ventana,
mis ojos no pueden más y rebosa su exceso;
las lágrimas son sabias esta noche.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Brotes de Esperanza (Soneto)

Cuando al árbol marchito, la estocada,
de este frío metal y verdad fría
se le atina en su bien y en justo día,
se le hace nido, calor y alborada.
Y en la yaga, voráz y descarnada,
desprovista de luz y de alegría,
será posible ver que cante y ría.
Serán sus labios de pena enterrada.
Y el gran vacío del adiós injusto
será cubierto por los brotes tiernos,
briznas de verde, pálida esperanza,
con fuerza nueva de su nuevo busto
que a vencer sus raices al invierno
se aproximan raudos en lontananza.

jueves, 16 de septiembre de 2010

De lo etéreo a lo material y vuelta a empezar

Un ejército leal a lo intangible
se atrinchera frente a mí.
Un caldo en ebullición sin olla donde reposar
que espera ser sazonado.
De lo etéreo a lo material
y vuelta a empezar.
Yo lo huelo, lo presiento,
lo imagino y lo libero.
Tu lo hueles, lo presientes,
me lo robas y lo entierras.
Surge de la nada para crear tu sentido;
el oportuno color que tus ojos anhelan,
la fragancia familiar que te abriga,
te adormece y te seda.
Este ejército me priva
de mi tiempo y de mi espacio.
Este caldo me consume en su hogar,
que también es mío,
para hacerme palpable;
yo su objeto, él mi objetivo.

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Río de vida

De la espesura de tu pelo
a las sabanas de tu vientre
se desliza mi deseo en llamas.
No vacilo con la intención
pero, torpe como el primer día,
araño el precipicio que muere en el hielo.
Y te enfrías,
caen las hojas mustias
y tu cauce se seca.
Río de vida que larga lengua derramas,
ataré mis errores a una roca
que ahogaré en tu viejo delta.
Para subir liviano a tu principio,
a tu nido de gotas nuevas,
y beber de lo que un día me atrajo a tus riberas.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Yo también digo que las estrellas

Las estrellas acuden confusas
a una huelga convocada por la luna.
El neón les recortó el salario
y su brillo se disuelve en la negrura.
Ni la noche está de buenas
para prestarse como pizarra,
que se ha vendido a luminarias
que le destiñen la panza...

Yo también digo que las estrellas

Las estrellas acuden confusas
a una huelga convocada por la luna.
El neón les recortó el salario
y su brillo se disuelve en la negrura.
Ni la noche está de buenas
para prestarse como pizarra,
que se ha vendido a luminarias
que le destiñen la panza...

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Sin título

En este camino de luces y sombras.
En esta cornisa precaria
En este pasillo de mil puertas
En este viaje de montaña rusa
En esta carrera sin meta
En esta melodía ingrata
de canción sin estribillo
En este morir nocturno
tras un parto de doce horas.
En este sembrar en roca.
En este pozo sin fondo
donde ahogamos esperanzas.
En este luchar contra fantasmas.
Aqui, de nuevo,
me encuentro con mi sombra.
La veo distinta, la siento distante.
Ahora es más mía que antes.

martes, 7 de septiembre de 2010

Bon Voyage!

Suelto vidas al viento,
vidas que queman a su paso el camino;
incierto e ilusorio rastro de terrones de azúcar.
La mitad de lo visto es complaciente
y moldea los deseos de sus almas puras,
ingenuas.
Sin opción al desastre,
cuidando los detalles.
"Que ni el viento los toque".
Mas tarde,
la tempestad arrastrará sus livianos cimientos
y caerán los telones,
los de acero, los de piedra
y los de humo.
¿Aguantarán las maromas que voy amarrando?
¿Serán sus pilares recios y firmes en los temblores?
¿Serán sus corazones lúcidos en las encrucijadas?
Suelto vidas al viento,
vidas que queman a su paso el camino,
mi camino obsoleto, mi puerto gris.
Ya sus navíos empiezan a soltar amarras
y yo miro temeroso al cielo.
Mientras sus velas se hinchan y empujan
en direcciones que no conocía.

martes, 22 de junio de 2010

Mis sueños siempre terminan durmiéndome a tu lado

Mis sueños siempre terminan durmiéndome a tu lado.
Recuerdo detalles graves y livianos,
soñé acariciar tu pelo mientras te pintabas,
frente al espejo del baño.
Soñé tu mirada sonrojándome el alma,
clavándose directa y descarada,
sincera, pura.
Soñé pasear contigo por tu querida playa,
esa que te robó tanto hace ya tanto,
y a la que envidio por ello.
Soñé que te cogía de la mano y paseábamos.
Soñé que me llevabas en tu coche al trabajo.
He soñado con nacimientos y alguna defunción.
Con comidas rápidas de tiempo acotado,
escapadas urgentes de la rutina,
mudanzas, algún viaje.
Recuerdo algún sueño terrible,
entre errores y decepciones,
pero también recuerdo sueños hermosos.
Y sé de muchos más sueños que ahora no recuerdo.
Los sueños son así y los míos,
siempre terminan durmiéndome a tu lado.

miércoles, 16 de junio de 2010

Cuando callo (Soneto)

Me enajena el amor que me retiene,
que de puro y altivo me acongoja,
y en el susto de mi alma se deshoja
el camino pasado y el que viene.
Sin vivir, que me mata y me revive,
prisionero del juego de su estado.
¡Un veneno potente nos fue dado!
Eficaz para el pecho del que escribe.
Pero todas las causas que develan
de su sueño a mi mente distraída
no se pueden reunir en un soneto.
Letras, vida, golosinas que anhelan
mis sentidos en esta acometida
son los que te hacen mi estar, secreto.

lunes, 14 de junio de 2010

Cazador de gorriones

Disfrazarme de pálidos harapos
de hojalatas, cristales y galones,
trafallar con espejos y jirones
de la imagen odiada de tus trapos.
Cabalgar con montura repujada
sin sentir el calor de mi caballo;
amar la flor y repudiar su tallo
como práctica vil y falseada.
Los dóciles gorriones comerán
de mis manos vacías, sin alpiste.
Sin caer en la cuenta del despiste
a entregarme sus almas volarán.

viernes, 11 de junio de 2010

Despojo de vuelta, amor de ida (Soneto)

Tus caricias se esconden de mi piel
que las busca incansable por la noche,
distraída, en el brillo de algún coche,
donde vendes tu cara más infiel.
Solo a veces te espero en la ventana
a que dejes caer lo que ha sobrado,
que no en balde aguantarlo te ha costado,
para cuidarlo fiel hasta mañana.
Y así estar de estreno cada día,
que no cueste que aflores la hermosura
que te labras así tu media-vida,
para luego esperarte en la afonía
de quien sufre en silencio tu clausura;
tu estás de vuelta y yo emprendo la ida.

martes, 8 de junio de 2010

En tu día (Romance)

En tu día, que es tan tuyo,
describiendo un nuevo paso,
a tu lado yo me aparto
del camino ya trazado.
A mi espalda una colecta
de palabras ordenadas,
un rosario de desdenes
y homenajes caprichosos.
Y es por ello que encadeno
a mi inercia en esta cerca
donde miro ya de frente
tu figura que se acerca.
¡Clava en mí tus garras puras!,
¡dame un golpe de dulzura!,
un arrojo a mi piel mustia
que me marque como a hierro.
Dale al paso de mi sombra
un motivo para hacerse
más espesa en el remanso
de mi lago complaciente;
que su estela te describa
como siempre supo que eras;
loca amante de amor loco
dando vida a mis riberas.
En la lucha, en la guerra,
los sentidos se confunden
olvidando de la esencia
si importancia, su perfume.
Y por eso en la trinchera
todo es lo que no debe
y renace, si conviene,
y se torna lastimera.
Pero huimos siempre atentos,
que la causa lo requiere,
renovando la floresta
con caricias de futuro.
Que en futuro nuestro día
se detiene y es pensado
como fruto que daría
la semilla que has sembrado
en el huerto de mi pecho
que reclama tu cuidado
que te espera, sol de mayo,
aguas mil de abril ansiado.
En tu día, que es tan tuyo,
describiendo un nuevo paso,
a tu lado yo me aparto
del camino ya trazado.
En mi espalda nada porto
todo queda en el sendero
donde ando, canto y muero,
y me viste traicionero.
Pero vengo libre y fácil
para ti, amada mía,
En tu día, que es tan tuyo,
solo quiero ser tu día.